Como instaladores acreditados de todo tipo de calderas en viviendas, inmuebles, edificios e instalaciones diversas, lidiamos habitualmente con averías en calderas de gas, si bien es cierto que, según la magnitud de la avería, son los servicios técnicos de los fabricantes los que se encargan de arreglarlas. En el caso de que se trate de averías sencillas en calderas de gas, tales como falta de presión, bomba clavada o una pequeña fuga en una válvula, sí que nuestros propios técnicos instaladores de Expósito las subsanarán rápidamente y con su diligencia habitual 🙂.
Los sistemas de calefacción fallan cuando más los necesitamos, que es cuando aprieta el frío. Lo mismo ocurre con los sistemas de refrigeración, como los aires acondicionados, que cuando las altas temperaturas se presentan, los aparatos fallan por múltiples razones. En ambos casos, el motivo principal no es otro que la falta de uso y los meses de inactividad.
Por eso es fundamental que nuestra caldera sea revisada periódicamente por técnicos especializados (cada 2 años según el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios – RITE). Es la mejor manera de prevenir, en un alto grado, posibles anomalías.
Ahondamos un poquito más en los tipos de averías en calderas de gas que se dan habitualmente y en sus motivos.
Averías en calderas de gas
El mantenimiento de las instalaciones en los edificios y las comunidades es un asunto serio de gran relevancia a la hora de medir la calidad de vida de los propietarios/as e inquilinos/as. Las inspecciones han de ser periódicas, para así evitar movilizarnos solo cuando se producen averías en las calderas u en otros elementos o circuitos.
El objetivo no es otro que garantizar la seguridad de las instalaciones y su correcto y eficiente funcionamiento.
Teniendo en cuenta que cuando hablamos de sistemas de calefacción en España el más extendido es el de caldera de gas, hay que adelantarse a los imprevistos. Es decir, a las averías calderas. Para ello, es 100% recomendable tener contratado un puntual y profesional servicio de mantenimiento.
Generalmente, en caso de avería en la caldera, el propio electrodoméstico te orienta sobre la anomalía a través del típico display electrónico que suele incorporar. Esto lo consigue gracias a los diferentes sensores con los que está configurada (presión de agua, aire, sensor de humos y de la temperatura). Dependiendo del fabricante de la caldera, utilizará un lenguaje de códigos u otro para identificar cada posible causa de la avería. Ya sea consultando su página web, o el mismo manual de instrucciones, podremos conocer tal lenguaje y saber qué tipo de averías calderas hay, y ver cuál nos está ocurriendo a nosotros/as.
Principales averías en calderas de gas
Algunas de las averías en calderas de gas que vamos a mencionar se podrían agrupar en similares anomalías, pero las destacamos por separado porque cada usuario/a las nombra o cataloga de una manera:
No se enciende el quemador
Muy común en modelos de calderas más bien antiguas. La presión es más baja de lo necesario, suciedad en los filtros de aspiración, el propio mecanismo de encendido está gastado y no llega el gas al quemador o la caldera está bloqueada por otra anomalía en el circuito, por ejemplo. Son varios los motivos que podrían estar detrás de este tipo de averías calderas.
Goteos (la caldera pierde agua)
La llave de llenado posiblemente tenga la clave de esta avería. Con el paso del tiempo, se deben sustituir (ojo con la suciedad que acumulan). O a lo mejor simplemente no se ha cerrado del todo. Otra causa muy habitual es la presión anómala del circuito. También habrá que revisar el purgador.
Problemas con la presión
En muchas ocasiones la avería en la caldera de gas proviene de anomalías en la presión. Que varíe la presión del agua de la caldera cuando se enciende la calefacción es normal (siempre y cuando oscile entre los 1,5 y los 2 bares). No habría que preocuparse por ello. Otra cosa es rondar o alcanzar los 3 bares, donde la propia caldera vaciará el agua extra del circuito, para volver a la presión estándar.
Hay varios motivos que pueden ocasionar esta avería en la caldera de gas:
- Deterioro del vaso de expansión
- Radiadores afectados por bolsas de aire
- Cierre defectuoso de la llave de la caldera por donde entra el agua
- Intercambio anómalo de presión entre el circuito ACS y el de calefacción, provocando subidas palpables de presión
También podría bajar la presión, lo que nos indicaría, generalmente, que hay algún tipo de fuga o que el vaso de expansión está afectado de algún modo.
No hay agua caliente y/o no funciona la calefacción
Todo un drama, especialmente si nos toca en plena ducha 😰.
La caldera enciende, lo cual tranquiliza, pero luego, no sale agua caliente o no hay calefacción. Averías en calderas de las que siempre oímos hablar.
En cuanto a que no haya agua caliente, puede ser provocado por un fallo en la circulación debido a la bomba de presión. También habrá que comprobar la válvula de 3 vías. Cuando la caldera le requiere agua caliente, si no está en su posición correcta, no llegará el agua al circuito ACS. Seguramente nos tocará cambiarla si está averiada.
También puede ser la razón de que no tengamos calefacción. Hay otras (siempre comprobar que los radiadores están abiertos), como el termostato, debido a (muy común) que el circuito esté vacío.
Problemas con la llave de llenado
Una de esas averías en calderas de gas que son más serias de lo que parecen. La llave de llenado es el elemento clave para controlar la presión del agua de la caldera. Vital siempre comprobar que está o abierta o cerrada, dependiendo de lo que necesitemos.
Son varios los motivos que pueden afectar a su funcionamiento: suciedad, cal, vaso de expansión, válvula de seguridad… Un técnico en calderas sabrá determinar cuál es exactamente la deficiencia.
Exceso de ruido
Cuando nuestra caldera suena de forma rara o vibra mucho más de lo que debería, nos está diciendo (si tenemos algo de experiencia en ello) qué tipo de avería tiene. Si no, un técnico especializado lo identificará al instante.
Estos ruidos suelen ser motivados por problemas con la cámara de combustión, con el extractor, o también con el intercambiador.
La caldera está muerta
Se le denomina así cuando la caldera no se pone en funcionamiento cuando abrimos el agua caliente desde cualquier punto del hogar (baños y cocina). Tenemos ante nosotros una avería de la caldera de gas también muy común. Generalmente una obstrucción en la salida de humos ocasiona que se accione el sistema de seguridad y evite el funcionamiento de la instalación.
Otras causas de que una caldera no arranque pueden venir de fallos en la sonda de temperatura ACS, en el sensor detector de caudal o por la falta de presión.
Cambios de temperatura
Esos cambios bruscos de temperatura en el agua son realmente molestos. Si nos ocurre, la avería seguramente estará en la propia sonda de temperatura. También podría estar localizado el problema en el intercambiador.
Un técnico nos aconsejará qué hacer, pero lo más seguro que opte por la sustitución de esas piezas defectuosas por unas nuevas.
Cómo proceder ante una avería caldera
En cuanto identificamos una anomalía con nuestra caldera de gas, la primera reacción suele ser ir a comprobar algunos aspectos básicos que la mayoría de usuarios/as en sus casas conocen medianamente. Por ejemplo, mirar si está encendida o se ha apagado y probar de nuevo el apagado-encendido, o si el quemador se ha apagado repentinamente, probar a encenderlo de nuevo y testar si se vuelve a apagar a los pocos instantes o no.
Más allá de aspectos sencillos de este tipo, cuando presenciamos averías en caldera de gas, tenemos generalmente 3 maneras de actuar:
- Leemos con detenimiento las instrucciones y hacemos nosotros/as mismos/as una evaluación del aparato y la instalación en busca de un posible arreglo
- Situación uno con desenlace no satisfactorio, se procede a llamar al servicio técnico para su revisión
- Directamente se llama con ese servicio técnico o profesional independiente cualificado
Conclusiones
Es inevitable que en toda vida útil de una caldera de gas se den anomalías y fallos en el funcionamiento de las mismas. Es, por tanto, esencial, que toda la instalación de gas de nuestra vivienda o edificio sea minuciosamente revisada a través de una inspección regulada y oficial (por normativa, cada 5 años).
Las averías en calderas de gas más habituales tienen causas conocidas que si no tenemos cierto manejo y experiencia con este tipo de instalación, es mejor dejar en manos de especialistas.
Cualquier duda en relación a las instalaciones de gas en la vivienda o inmueble, en Instalaciones Expósito estamos a vuestra disposición.
📞 93 138 67 98
Eduardo Expósito Izquierdo
Instalador autorizado de luz, agua y gas.
Gerente en Instalaciones Expósito SL
